Diríjase al Puente Viejo de Montauban. Sus arcos cruzan el Tarn desde la Edad Media. Es desde allí donde la ciudad le revela el perfil más hermoso de su arquitectura de ladrillo anaranjado.
Orilla derecha: el antiguo palacio episcopal que alberga el museo Ingres Bourdelle, el Museo de historia natural, la iglesia Saint-Jacques y los antiguos conventos que bordean los muelles.
Orilla izquierda: palacetes. Recuerdan que Montauban fue una ciudad de grandes comerciantes, a pesar de su pasado de plaza de seguridad protestante por lo que tuvo que soportar la furia de Luis XIII.
Insólito
Montauban, rebelde a la autoridad católica, fue asediada en 1621 por el ejército real y resistió gloriosamente. ¡Podemos ver las marcas de los cañonazos disparados sobre la iglesia Saint-Jacques, en la base del campanario!
Tome el pulso a Montauban Place Nationale. Rodeada de arcadas dobles, esta magnífica plaza con acento italiano sigue siendo el corazón palpitante de la ciudad. Un siglo antes de la edad de oro de las bastidas, en 1144, la ciudad fue edificada según un plano de damero en torno a esta plaza.
A su alrededor, las calles peatonales le permitirán descubrir las pequeñas tiendas y los comercios de alimentación, pasando delante de pesados portones que comunican lujosos palacetes, y otros detalles arquitectónicos que evocan la riqueza del patrimonio de Montauban.
El museo Ingres Bourdelle, uno de los más grandes de la región de Occitania, ocupa el antiguo palacio episcopal de Montauban. Actualmente se está reformando. Nacido en Montauban en 1780, Ingres es un maestro del clasicismo francés.
En 1861 también nació en la ciudad el escultor Antoine Bourdelle, alumno de Rodin. Mientras se espera la reapertura del museo, descúbralos fuera de los muros en la capilla del Antiguo Colegio. Por otra parte, la catedral Notre-Dame-de L’Assomption alberga una obra maestra de Ingres, “El voto de Luis XIII”.
No debe perderse
El Centro del Patrimonio le propone una interesante exposición permanente (“Montauban, portrait d’une ville”) (Montauban, retrato de una ciudad) así como visitas con guías turísticos y numerosas animaciones para todas las edades.
Realmente irresistible
Venga al mercado del sábado en las alamedas del Consul Dupuy. A la sombra de los plátanos, haga provisión de los productos de una región donde maduran en abundancia manzanas, cerezas, uva albilla de Moissac DOC, melones de Quercy, etc.
A 20 min. a pie del centro de la ciudad se encuentra Port canal, el puerto deportivo de Montauban: un remanso de paz donde los habitantes de Montauban y los turistas se reúnen en un verde entorno. Leer un libro bajo los árboles, pasear a lo largo de las orillas, tomar una copa admirando el ballet de los barcos… Por un lado el Tarn y, por el otro, el canal de Montech que desemboca en el Canal des Deux Mers en 11 km y 11 esclusas. Un hermoso paseo para hacer en bicicleta (punto de alquiler en el puerto), a lo largo de una vía verde habilitada en el antiguo camino de sirga.
Realmente irresistible
Una pausa refrescante en la ciudad con el complejo acuático Ingréo. Espacios acualúdicos en el interior y fuera, espacios de puesta en forma y bienestar, piscinas (una olímpica) e incluso un foso de buceo: ¡lo mejor!
Durante un crucero comentado o un barco sin permiso de navegación atraviese la ciudad de Ingres, pase bajo sus 6 puentes y, luego, vaya al descubrimiento del Tarn salvaje y de su biodiversidad. El Tarn es un río con muchos peces que atrae numerosas especies de aves. ¡Observe bien! Tal vez se crucen en su camino garzas reales, garcetas y martines pescadores.
Viaje en tren
Descubra Montauban en tren con el Occitanie Rail Tour, en la línea de los Dos Mares o la línea Lot y Dordoña.
Nuestras sugerencias
Para un fin de semana o unas vacaciones, encuentre su alojamiento en Montauban.
¿Cómo llegar?
Montauban es la capital de provincia de Tarn y Garona, y se encuentra a 45 km al norte de Toulouse.
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