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Marseillan, punto de partida de este fabuloso viaje, es una escala de la línea del Mediterráneo.
el mejor momento
Primavera, Verano, and Otoño
Disfrute de un fin de semana de lujo a orillas de la laguna de Thau. La laguna de Thau, situada entre Montpellier y Béziers, frente a Sète, es todo calma y voluptuosidad. El plan será atreverse con una atrevida preparación de ostras y disfrutar de un fabuloso spa, de ambientes de degustación, de los viñedos y del patrimonio de antaño. Descubrirá la guarida perlada de la familia Tarbouriech, ostrera desde 1962, y luego la majestuosa Abadía de Valmagne, donde se produce vino desde hace 800 años.
Es el lugar ideal para descubrir la ostricultura, los parques ostrícolas equipados con paneles fotovoltaicos, así como el ciclo de crianza de las ostras especiales de Tarbouriech.
Frente a Sète tomará un pintoresco camino y a lo lejos divisará la laguna de Thau. Entre viñedos, se dirigirá lentamente hacia el Domaine Tarbouriech, situado al final del camino, alejado de todo... La luz es brillante y el lugar es tranquilo. La bonita casa surge ante nosotros, y las ostras están ahí, por todas partes, incluso en los recorridos, diseminadas en mosaico. Amantes de las ostras, han llegado a la guarida perlada de la familia Tarbouriech.
Merece la pena desviarse
Amantes del buen vivir, antes de llegar, hagan un pequeño alto para almorzar a orillas de la laguna de Thau en uno de los bonitos pueblos ostrícolas, en Bouzigues o Mèze.
Son las 14:00 horas. Demasiado pronto para descubrir su lodge, pero perfecto para disfrutar de un tratamiento de ostriterapia. Un masaje en pareja es ideal. El SPA del Domaine Tarbouriech le invita a dejarse llevar y su equipo le colmará de todo tipo de cuidados. La ostra sigue estando por doquier, en los cosméticos, en la decoración, en los momentos de relax total, para cargar pilas y deshacernos del estrés.
Realmente irresistible
Inspirada en el uso de las ostras en China, por sus virtudes reconocidas desde hace miles de años, y consciente de sus poderosos principios activos, la Maison Tarbouriech creó la "ostriterapia" y sus propios cosméticos y Spa.
Antes de la cena, puede dar un paseo en una de las bicicletas que el establecimiento pone a su disposición. Diríjase al interminable pontón de Saint Barth, el lugar de degustación de la ostra de Tarbouriech.
Imagínese ese momento de atardecer en absoluta calma, una playa salvaje y un mar interior salpicado de criaderos de ostras. A la izquierda, Sète teñida de rosa. A la derecha, la colina de Agde despunta en el horizonte donde el sol desaparece suavemente al otro lado del mundo. Idílico...
No debe perderse
El Canal du Midi, patrimonio mundial de la UNESCO, discurre a lo largo de 360 km desde Toulouse hasta Marseillan. Su desembocadura se encuentra a 2 km en línea recta del Domaine Tarbouriech. ¡Descúbralo!
Regrese a la propiedad para disfrutar de una cita gastronómica en el restaurante La Folie. Puede optar por el menú "especial ostra" para disfrutar de un condensado de sabores originales y sutiles. Una pasión que se saborea... 3 ostras especiales de Tarbouriech preparadas con audacia y regadas con un Picpoul de Pinet harán las delicias de su paladar. ¡Y el chef le reserva una sorpresa! ¡Podrá verlo cocinar!
Consejo del experto
El Picpoul de Pinet es una variedad de uva típica del Hérault que se marida especialmente bien con el marisco. Si desea más información, siga el Oenotour del Hérault.
Después del almuerzo, ponga rumbo al lodge cabaña. El alojamiento para esta noche es una antigua granja renovada con elegancia. Piedra, madera, metal, todo es hermoso y relajante, como todo lo demás, espléndido. A la mañana siguiente, disfrute del desayuno bufé: zumo de frutas recién exprimido, mermeladas caseras, productos locales, fruta, bollería, pasteles, panes divinos. Todo es exquisito... ¡y ecológico!
Se marchará de la propiedad con un delicioso recuerdo. La familia Tarbouriech ofrece una gran variedad de actividades en torno a la ostra y la laguna de Thau, ¡por lo que seguro que repetirá la experiencia!
¿Sabía que…?
La ingeniosa familia Tarbouriech diseñó la Marea Solar, un sistema que reproduce las mareas del Atlántico y que de este modo le aporta a la Ostra Especial toda su "grandeza" y su carne llena de vitalidad y de dulzura.
Ponga rumbo a la majestuosa Abadía de Valmagne, a 30 minutos de distancia, situada al final de una avenida de plátanos, y ubicada entre los viñedos de Languedoc.
La abadía cisterciense del siglo XII, que también posee un viñedo, se yergue ante usted y podrá contemplar el claustro y la elegante fuente sombreada. Sin despegar los pies del suelo, pero con la cabeza en el cielo, se abrirá paso por la inmensa nave de estilo gótico radiante con sus enormes toneles de roble ruso.
Tras la huida de los monjes en la época de la Revolución, el nuevo propietario transformó la iglesia en una bodega de elaboración de vinos y construyó estas famosas cubas de roble ruso que pueden contener hasta 435 hectolitros.
En la bodega en claroscuro, comenzará con la degustación de "Vitrail de l'Abbaye", en el que se depositan con suavidad los efluvios de Sète. Percibirá la mineralidad del terruño, el suelo pedregoso que dio origen a "Portalis", la cuvée del fundador. Y qué decir de "Turenne", la cuvée del antepasado del fundador, que llena el paladar de estructura y sol. Cuando la abadía se puso en venta en 1838, Henri de Turenne la compró con la autorización del obispado. Éste realizó considerables reformas y desarrolló especialmente la producción de vino.
Desde entonces, de generación en generación, los descendientes de Henri de Turenne se han ocupado de la Abadía de Valmagne y han dado forma tanto al lugar de culto de la abadía como a su producción agrícola.
En el restaurante de la Abadía de Valmagne le espera una calurosa acogida. La sala abovedada del Frère Nonenque desprende calma y serenidad y el cenador de la terraza resulta muy agradable. El chef ofrece una auténtica cocina ecológica de la huerta, productos locales y campestres, y auténtica comida casera.
Dese un paseo por la sencillez del jardín de 120 plantas antes de emprender el camino de regreso. Cada una de las plantas figura ilustrada y explicada. En él descubrirá con asombro las flores y plantas que le regalaron la vista y el paladar durante la comida. Y como un regreso a la infancia, con las manos en la tierra, podrá imaginarse ver florecer esa naturaleza esencial.
Información práctica
Es necesario reservar, ya que, "Frère Nonenque", el restaurante de la abadía, es muy popular. Éste ofrece una pequeña carta de productos frescos que cambia según la temporada. Le recomendamos que utilice el aparcamiento situado frente a la entrada de la Abadía, siempre hay sitio.
¿Cómo llegar?
Domaine Tarbouriech - Abadía de Valmagne (28 min - 25 km): tomar la D51 en dirección Mèze, luego la D158 y luego la D5E8 por la Route de Villeveyrac. Esta ruta se puede realizar en bicicleta.
Tu itinerario con