La línea liO Car 668 «Montpellier – Saint-Guilhem-le-Désert – Clermont-l’Hérault» te lleva a las gargantes del Hérault. Todo un disfrute para los fanáticos de la historia, la artesanía artística o el turismo enológico, y también para los que prefieren el baño, la canoa, las excursiones o las visitas de cuevas.
Opción de alojamiento y restauración en cada etapa.
A 40 min de Montpellier. Parada: Pont du Diable. Situado a la entrada de las gargantas del Hérault, el puente medieval, declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO, se encuentra en un sitio excepcional.
Se accede a él desde la Casa del Gran Sitio siguiendo un camino peatonal y la pasarela de Anges de Rudy Ricciotti. El lugar también es ideal para baños o paseos en canoa o paddle surf. Muy cerca, no te puedes perder la visita de la cueva de Clamouse.
A tener en cuenta: en temporada, hay lanzaderas gratuitas que llevan del puente del Diablo al pueblo de Saint-Guilhem-le-Désert y a Argileum, el centro de alfarería de Saint-Jean-de-Fos. Más información.
A 45 min de Montpellier. Parada: Centre. Saint-Guilhem-le-Désert forma parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO y está clasificado «Plus beaux Villages de France» (Pueblos más bellos de Francia).
Deambula por las callejuelas de la ciudad medieval tras los pasos de los peregrinos de los Caminos de Santiago. Después de un descanso en la bonita plaza con su plátano centenario, no te pierdas la visita de la abadía de Gellone. El pueblo es el punto de partida de excursiones de senderismo inolvidables. Más información.
A 50 min de Montpellier. Parada: Argileum. La ciudad medieval es famosa desde hace siglos por sus alfareros.
De hecho, Argileum - La Maison de la poterie (la Casa de la Alfarería) está ubicada en el taller de un alfarero del s. XIX completamente restaurado. Miembro de los sitios de excepción de Languedoc, Argileum ofrece a los visitantes un recorrido de descubrimiento lúdico e interactivo que cautivará a toda la familia. Más información.
A 55 min de Montpellier. Parada Coopérative. En el corazón de la denominación «Terrasses du Larzac», Montpeyroux es un pueblo vitícola famoso, donde da gusto descubrir los vinos de las numerosas fincas y de la cooperativa artesanal Castelbarry.
Con vistas a la ciudad, el «castellas» de Montpeyroux es una fortaleza del s. XIII de obligada visita. Más información.