Lavaur, antaño a favor de la causa cátara, ocupó un lugar central en el cultivo de la hierba pastel en el siglo XVI. ¿Lo sabías? La hierba pastel es una planta de la que se extraía un pigmento azul que se compactaba en forma de bolas, las llamadas «cocagnes». El comercio floreciente dio pie al nacimiento del legendario «país de cucaña», el cual se extendía entre Toulouse, Albi y Carcasona.
Lavaur es una ciudad con carácter de colores languedocianos en la que podrás descubrir muchos tesoros.
Contemplar el «jacquemart» de Lavaur, único en su género, mientras toca las horas desde lo alto de la catedral de Saint-Alain.
Hablar con los productores locales en el gran mercadillo de los sábados por la mañana.
Hacer un pícnic o echarte una siesta en la explanada de Plô.